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CCOO y UGT dispuestos a que los aumentos salariales sean menores al 2% hasta 2016 Todavía no hay acuerdo en la 'ultraactividad' y los sindicatos no tienen prisa
Los sindicatos están dispuestos a aceptar la propuesta de la CEOE de ligar la subida salarial al crecimiento de la economía en este año y en 2016. Sería la primera vez que sucede en la historia laboral. CCOO y UGT asumirían un alza de las nóminas en 2015 del 1,5% si el PIB_crece por encima del 2% y del 1% si no supera esa cifra.
Aunque advierten que sin pacto salarial no firmarán un nuevo acuerdo para tres años que garantice la moderación de los sueldos y la paz social en la negociación colectiva en este año electoral (municipales, autonómicas y posiblemente generales), los sindicatos han anunciado que aceptan la propuesta de la CEOE y de Cepyme de vincular las subidas al incremento del PIB.
Se trata de una nueva modalidad de alza salarial cuando es imposible ligar la moderación de la retribución a otros parámetros. Es decir, el IPC ya no es indicador aceptable, sobre todo porque está en tasas negativas y además genera mecanismos inflacionistas de segunda vuelta. Tampoco sirve indiciar la subida salarial a la productividad, una eterna pretensión de la patronal, cuando la denominada productividad aparente es precisamente ahora mucho más elevada que los sueldos. Sucede porque hay menos trabajadores activos y con menos nómina mientras sigue creciendo el PIB. Por tanto, este nuevo mecanismo es el que parece que puede servir para acercar posturas.
En concreto, según explicaron ayer en el marco de unas jornadas sobre negociación colectiva organizada por Arinsa los secretarios de Acción Sindical de ambos sindicatos, Ramón Górriz (CCOO) y Toni Ferrer (UGT), las centrales plantean un alza salarial del 1,5% para este año si el PIB a precios constantes sube más de un 2%. En caso de que lo haga por debajo de esa cifra, aceptarían un 1% de incremento.
La previsión del último cuadro macro del Ejecutivo es de un crecimiento del 2% precisamente para 2015. Pero, el ministro de Economía, Luis de Guindos, ha anunciado que en abril, cuando se envíe el nuevo cuadro a Bruselas, se revisará al alza esa estimación. Como consecuencia del regalo de la caída de los precios del petróleo, así como de la devaluación del euro y de los efectos de la reforma fiscal, la mayoría de los servicios de estudios apuntan a un incremento del PIB cercano al 2,5%.
Para 2016, contando con que la economía evolucione mejor que durante este año, los sindicatos proponen subidas salariales de hasta el 2%. La última previsión del Gobierno para este año, que figura en el Plan de Estabilidad, es del 2,3%.
En cualquier caso, para ambos ejercicios, los sindicatos reclaman cláusulas de garantía salarial a la espera de que las últimas medidas del BCE, la compra de bonos públicos para facilitar más liquidez financiera, den sus frutos. Las centrales estiman que el IPC volverá a rondar el 2% a finales de 2016. «No podemos jugar a la ruleta con el sueldo de los trabajadores. Tiene que haber cláusula de salvaguarda», señaló Ferrer.
En cuanto a 2017, año en que el Gobierno prevé un crecimiento del PIB del 3%, los sindicatos dejan el porcentaje de subida salarial abierto, con una fórmula que tenga en cuenta cómo se comportó la economía en 2016 y las previsiones oficiales para 2017 en ese momento. Con estos parámetros, dejarían para los tres primeros meses de 2017 la negociación salarial para ese ejercicio.
Según reconoció Ferrer, «no hemos tenido problema en asumir como referencia salarial el PIB». Los sindicatos plantearon inicialmente que en los próximos años los salarios se indexaran al IPC y la evolución de la productividad para que los trabajadores recuperaran poder adquisitivo.
Sin embargo, tanto Ferrer como Górriz señalaron que, tanto en el tema salarial como en la ultraactividad, la situación es aún de estancamiento. En todo caso, la CEOE pretende en 2015 que el incremento salarial sea inferior al de 2014.
Las partes seguirán negociando esta semana. Los sindicatos han dejado claro que el acuerdo tiene que contemplar mejoras salariales porque, de lo contrario, no lo firmarán.
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