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Capitalizar el paro, es decir, cobrarlo en un pago único para iniciar una nueva actividad económica, se ha convertido en una opción cada vez más visible. Sirve para que los desempleados apuesten por el autoempleo y cuenten con una base para ello. Según recordó hace pocos días la ministra de empleo española, Fátima Báñez, son 151.000 los parados que el año pasado optaron por esta vía, un 4% más que en 2012. El Gobierno español, que ve como el paro sigue siendo un lastre, parece dispuesto a apostar por la fórmula del autoempleo para frenar esas tasas y en ese sentido ha anunciado que ampliará la capitalización del 100% de la prestación por desempleo a los mayores de 30 años que pretendan iniciar su actividad como autónomos.
Capitalizar ese capital no está exento de riesgo, como explica Jon Bengoetxea, socio junto a su hermana Idoia de la bacaladería Bengoetxea en Amorebieta y que optó por esa vía cuando su panorama laboral se oscureció. Recibir la prestación por desempleo pendiente le sirvió para sentar las bases de su empresa pero admite que "te quedas sin nada". Padre de familia, Jon siente que con esa fórmula "lo apuestas todo y hasta que el negocio no empieza a funcionar no recibes nada". El colchón del paro pendiente se usa como inversión y no siempre se obtiene el mismo resultado. En su caso, fue una apuesta. Dos años después de abrir su propio negocio no se arrepiente y afirma que volvería a repetir esa vía de financiación, "porque sino es imposible" obtener crédito suficiente, máxime cuando el grifo del crédito de las entidades financieras sigue sin manar con fluidez.
A Jon la crisis se le echó encima. Con casi 45 años, su empresa cerró y se vio con pocas opciones laborales. Estaba en la edad crítica, esa en la que volver a colocarse resulta complicado, más con la crisis en crecimiento. "Viendo que la empresa iba mal yo ya había empezado a pensar en abrir un negocio propio, pero todo arrancó cuando tuve la necesidad" explica. Como él hiciera un año antes, 151.465 personas se beneficiaron en 2013 del sistema de capitalización de la prestación por desempleo, el denominado pago único. Para cobrarlo, los parados aspirantes deben incorporarse como socios a una cooperativa o sociedad laboral o iniciar su actividad como trabajador autónomo.
Bengoetxea tanteó varias opciones y finalmente creó una cooperativa junto a su hermana Idoia, inaugurada en junio de 2012. "El bacalao es algo que conocemos de toda la vida y vimos que en Zornotza había una carencia", explican. Acudió a Gaztenpresa, la fundación de Caja Laboral, y tras desarrollar el plan de negocio apostaron por una idea viable.
Entonces comenzó otra travesía. Tuvieron que afrontar la obra de un local vacío, lo que implicó una inversión importante y la necesidad de financiación. Él optó por capitalizar "trece meses de paro". "Tuve que presentar el plan de viabilidad, crear la cooperativa y demostrar con facturas las inversiones", rememora.
Y es que hasta ahora solo podían aspirar al cobro del 100% de la prestación en un solo pago los socios de cooperativas o sociedades laborales y los autónomos discapacitados o menores de 30 años -en el caso de los hombres- o de 35 años -en el caso de las mujeres-, quedando excluidos el resto de los trabajadores por cuenta propia. Éstos últimos, solo podían optar a la capitalización de hasta el 60% y la cantidad restante la recibían de manera periódica para financiar los costes de la Seguridad Social.
Ampliación Sin embargo, la ministra Báñez anunció el pasado mes que la capitalización del 100% se ha ampliado a los mayores de 30 años. Según la ministra andaluza, "la capitalización del desempleo para iniciar una actividad emprendedora ha dado muchas oportunidades a mucha gente de iniciar un proyecto empresarial cuando, desgraciadamente, perdieron su empleo".
Para las asociaciones de autónomos se trata de una buena medida. El presidente de la Federación Nacional de Asociaciones de Trabajadores Autónomos (ATA), Lorenzo Amor, dijo nada más conocer el anuncio que "no era lógico que la capitalización del 100% del desempleo no se extendiese teniendo en cuenta su éxito". El motivo, a su juicio, es que ha sido una medida "buena y efectiva" para los emprendedores, "más aún en un momento en el que los nuevos autónomos tienen problemas para acceder a la financiación". Sebastián Reyna, secretario general de la Unión de Profesionales y Trabajadores Autónomos (UPTA) fue más allá al apuntar que el próximo año hasta 200.000 desempleados podrían beneficiarse de la capitalización de su prestación por desempleo. Como hizo Jon Bengoetxea.
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