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El presidente de Cantabria, Ignacio Diego, explicó ayer que el Gobierno cántabro no hará público qué cantidad económica aporta la sociedad pública Sodercan para la instalación de una nueva planta de Tubacex, en Marina de Cudeyo, por el derecho de los socios privados del proyecto a la privacidad, y porque debe respetar una cláusula de confidencialidad.
La empresa siderúrgica alavesa Tubacex decidió instalar en Marina de Cudeyo (Cantabria) una planta para el desarrollo de servicios avanzados, tras la decisión del Gobierno cántabro de ofertar suelo gratuito a empresas para que se instalen en la región.
Ignacio Diego señaló que la empresa regional Sodercan tiene una participación del 19 % en el capital social de la nueva filial de Tubacex, la empresa cuya instalación está prevista en Orejo (Marina de Cudeyo).
Y añadió que, conforme al acuerdo que se ha firmado, el Gobierno de Cantabria recuperará la inversión con intereses a los cinco años.
Diego afirmó que "entiende" que los cántabros tienen derecho a saber el dinero público que se va a invertir en este proyecto industrial, pero también defiende el derecho de los socios a "unos mínimos de privacidad".
Según apuntó no hay solo una razón por la que no se desvela la cantidad aportada en Tubacex, tal y como ha reclamado el PSOE, que además ha pedido que se le remitan las escrituras de constitución de la sociedad.
El presidente cántabro destacó que Tubacex cotiza en Bolsa, tiene más de 50 años de experiencia en el sector, y va a iniciar en Cantabria una actividad con la que se prevé una inversión de 14 millones de euros y la generación de un centenar de empleos. |
