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"Intolerante y soberbia" es, según el sindicato mayoritario vasco ELA, la postura de la organización empresarial Confebask que estos días, por boca de su secretaria general, Nuria López de Gereñu, ha cuestionado las decisiones judiciales en lo tocante a la reforma laboral, ya que una mayoría de fallos de los tribunales se muestran favorables a mantener la ultraactividad de los convenios colectivos.
El comité ejecutivo de ELA considera que la reacción de Confebask criticando los fallos judiciales, bajo la premisa de que las interprestaciones de los jueces son contrarias "al espíritu de la ley" que ha animado la reforma laboral española, es "propia de una patronal intolerante y soberbia".
La organización sindical que dirige Txiki Muñoz emplazó también al Gobierno vasco a que "diga algo contra ese proceder" de la organización empresarial vasca. ELA cuestiona que en un momento en el que "se están dinamitando todos los derechos laborales y sociales", el Ejecutivo vasco se limite a señalar que lo único que sobra es "el conflicto social", algo que, según el sindicato, demuestra "una falta de equilibrio inadmisible".
Asimismo, denuncia que la patronal actúa "con barra libre" porque "cuenta con apoyo político y con la seguridad de que el Tribunal Supremo va a tumbar las sentencias sobre ultraactividad en los recursos". En esta línea argumental, ELA hizo referencia a unas declaraciones de la patronal española CEOE preguntándose para qué van a negociar si la reforma laboral "la validará el Constitucional" y el fin de la ultraactividad "el Tribunal Supremo".
Ajena a las críticas de ELA, la secretaria general de Confebask, Nuria López de Gereñu, volvió a reiterar ayer que algunas interpretaciones del articulado de la reforma laboral recogidas en resoluciones judiciales son "contrarias" al espíritu de la ley porque hay sentencias que "ponen en vigor convenios de hace diez años". En su opinión "no se pueden perpetuar los convenios".
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