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La empresa guipuzcoana que cuenta con más asalariados, CAF, va a disponer de un convenio colectivo que se blindará de la reforma laboral con el fin de garantizar el mantenimiento del empleo y las principales condiciones laborales de la plantilla. Según ha podido conocer DNA de fuentes de la negociación, la dirección de la firma fabricante de material rodante ferroviario ha dado el visto bueno a la propuesta de convenio, que todos los sindicatos trasladarán este próximo viernes a la asamblea de trabajadores que, probablemente, aceptará el texto, que tendrá una vigencia de dos años (2014-2015) y se dota de una cláusula que habilita una ultraactividad por otros dos ejercicios para el caso de que no se llegue a un acuerdo sobre su renovación.
CAF dispondrá de un convenio colectivo en lugar de la fórmula jurídica utilizada hasta ahora, el acuerdo de empresa. Esta modificación ha sido reclamada por las centrales sindicales y con ella se persigue dotar al texto de la fuerza legal necesaria para poder incluir contenidos que permitan mantenerlo al margen de determinadas medidas introducidas por las últimas reformas laborales del Gobierno, entre ellas la obligatoriedad de un arbitraje para los supuestos en los que no haya acuerdo entre empresa y representantes de los trabajadores acerca de la inaplicación del convenio cuando concurran causas económicas, técnicas, organizativas o de producción.
Dicho de otro modo, en el caso de que la dirección de CAF optara en un futuro por rebajar los salarios ante una eventual situación negativa del negocio, la falta de consenso sobre la medida con los sindicatos no obligaría a tener que llevar el conflicto al Preco y resolverlo mediante arbitraje. De esa manera, el texto normativo propuesto en la compañía guipuzcoana -con ámbito de aplicación en sus factorías de Beasain e Irun- se blindaría de la reforma laboral en lo que concierne al modo de abordar la inaplicación del convenio en materias como la jornada de trabajo, el horario y la distribución del tiempo de trabajo o los salarios, entre otras.
El articulado también introduce mecanismos para garantizar el nivel actual de empleo, impidiendo que la puerta abierta por la reforma laboral sea atravesada por el fabricante ferroviario. Así, la compañía se comprometería a que no haya despidos durante la vigencia del convenio.
En lo que atañe a las remuneraciones de la plantilla, el texto contempla un incremento anual de los salarios del IPC que, en el caso del presente ejercicio, será del 0,6%, dos puntos porcentuales menos que en lo recogido en el Pacto de Empresa 2012-2013. La situación de la compañía no la misma ahora que la de hace dos años, puesto que ha descendido el número de contratos conseguidos a causa de los recortes que las administraciones públicas han aplicado en infraestructuras ferroviarias y la cada vez mayor competencia internacional.
Misma jornada El convenio colectivo de CAF mantendrá la jornada semanal de 35 horas, lo que supone otro avance respecto a la propuesta inicial de la compañía, que planteaba un incremento del tiempo de trabajo.
El texto es el resultado de meses de negociación que terminaron el pasado viernes cuando los sindicatos presentes en el comité (LAB, ELA, CCOO y ESK) llegaron a un acuerdo con la dirección sobre el texto provisional del nuevo cuerpo normativo para la plantilla de CAF, cuyas condiciones laborales se regirán por el convenio del Metal de Gipuzkoa en lo que no esté regulado por el convenio de la empresa.
El acuerdo, que deberá ser ratificado el lunes por la asamblea de trabajadores, confirma la paz social reinante en el gigante beasaindarra desde que la empresa echara atrás, ante la presión sindical, su intención de aprobar para el primer semestre de 2013 un ERE de suspensión de contrato para 869 empleados, teniendo como escenario la entonces falta de carga de trabajo para la división número 4, dedicada al acabado de producto. |