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Ahora que la recesión ha quedado atrás tras encadenar Euskadi dos trimestres consecutivos -Gipuzkoa uno más- sin descenso o con crecimiento económico, el debate se centra en cómo y a qué velocidad se saldrá de la crisis. En este nuevo escenario que se abre ahora tras seis años de fuerte depresión, el mercado laboral vasco es uno de los principales termómetros, y según varios expertos consultados por este periódico, tanto Euskadi como nuestro territorio encaran con mayor fortaleza que el resto del Estado la incipiente recuperación a pesar que sale algo más rezagada. En esta especie de radiografía del mercado laboral vasco y guipuzcoano, tanto la catedrática Sara de la Rica, como Adegi, UGT y Adecco-Euskadi hacen un repaso de las fortalezas y debilidades del mismo así como de otros aspectos que consideran importantes a la hora de valorar no solo los elementos cuantitativos sino también los cualitativos.
Todos ellos coinciden en destacar el mayor peso de la industria y la mejor cualificación de su capital humano como principales fortalezas, a las que habría que añadir otros aspectos, como la menor tasa de desempleo, temporalidad más reducida, mejores salarios y oportunidades laborales, mayor cobertura de prestación e incluso menor destrucción de su tejido empresarial que en el conjunto de España. Fortalezas que hay que preservar y que servirán de palanca para asentar una salida más solida de la crisis, según subrayan.
Pero no todo son parabienes. El envejecimiento de la mano de obra o el poco peso que tienen los servicios cualificados son las principales debilidades, a las que habría que sumar algunos riesgos. Así, Adegi y Sara de la Rica subrayan que hay que tratar de evitar que los mayores niveles salariales nos impidan ser competitivos en precio respecto a los competidores.
No obstante, la catedrática alerta que «esto no nos debería llevar a una economía de salarios bajos, ni mucho menos» ya que Euskadi debe aspirar a ser una «economía de alto valor añadido, con fuerte peso de un sector industrial innovador y si es posible con un sector servicios cualificado, lo que requiere de mano de obra cualificada y en consecuencia, de salarios relativamente elevados».
Por su parte, UGT destaca precisamente la necesidad de preservar la capacidad adquisitiva para fomentar el consumo e impulsar la salida de la crisis. A este respecto, Adecco se limita a constatar que la evolución de la capacidad de compra de la remuneración media en Euskadi a lo largo de la crisis ha sido la más favorable, con un aumento del 0,9%, frente a una pérdida del 3% experimentada en el conjunto de España. A continuación detallamos algunos de los aspectos más significativos.
España se adelanta en la creación de empleo. La recuperación del empleo, con sus altibajos en los últimos meses, empieza a ser más intensa en España que en Gipuzkoa y Euskadi. Según los últimos datos de afiliación a la Seguridad Social, que datan de febrero, en el conjunto del Estado el número de trabajadores inscritos en la Seguridad Social se incrementó un 0,38% con respecto a un año antes, mientras que en Euskadi se redujo un 0,57%. Gipuzkoa, que ofrece un mejor comportamiento dentro de la CAV, se quedó a un escaso -0,13%. Respecto a un mes antes, en los tres casos se registra un incremento, aunque algo más intenso en el conjunto de España (0,39%) que en Euskadi (0,18%) y Gipuzkoa (0,19%).
UGT destaca al respecto que debe darse por sentado que Euskadi entró seis meses más tarde en la crisis que el resto de España y que en «la supuesta recuperación está arrastrando ese retraso». Pero apunta que el mayor componente industrial de Euskadi y de Gipuzkoa hacen que la recuperación sea más lenta porque la demanda llega más tarde en los bienes industriales y su crecimiento en los ciclos altos es también más ponderada en el tiempo.
Con todo, ese mayor peso industrial no supone una rémora sino un baluarte, ya que permitirá según todos los expertos consultados que se encare la salida de la crisis con mayor fortaleza, «porque es el sector que conlleva mayor innovación». Al respecto, Sara de la Rica destaca que en España la industria supone el 15% del PIB mientras en Euskadi se eleva al 24%.
Tasa de desempleo. Se amplía la brecha de Euskadi. El País Vasco sigue siendo la comunidad con la menor tasa de desempleo, y Gipuzkoa ostenta el honor de ser la provincia con el índice más reducido. Así, mientras en el conjunto de España la tasa de desempleo se situaba a finales del año pasado en el 26,4%, la de Euskadi se limitaba al 15,8% y la de Gipuzkoa a un 12,75%. Pero lo más llamativo, según Adecco es que la brecha se ha ampliado en el último año entre el País Vasco y la media española, ya que ha pasado de una diferencia de 10,1 puntos en 2012 a 10,5 puntos el año pasado.
Menos optimista se muestra la responsable de Acción Sindical de UGT Euskadi, Maribel Ballesteros, quien pone el acento en la evolución durante la crisis. Así, indica que entonces la tasa vasca era un 50% inferior a la española. Es más, destaca que estamos a punto de perder el millón de personas activas en la CAV «situándonos en la antepenúltima autonomía en la tasa de actividad.
Por su parte, Sara de la Rica destaca que el 31% de los 170.000 parados de Euskadi tiene más de 45 años, el 25% tiene estudios superiores y posiblemente, lo más preocupante es que el 55% de los parados de Euskadi lleva más de un año parado. Considera que muchas de las personas, como jóvenes universitarios, probablemente encontrarán trabajo a medida que la reactivación económica se produzca, pero cree que para muchos de ellos, en particular para los mayores de 45 años que llevan más de un año en paro -y en muchos casos dos- la reactivación económica no será suficiente para devolverles al mercado de trabajo. «Harán falta planes de formación y recolocación específicos para este colectivo, que pasan posiblemente por planes locales y comarcales».
Temporalidad más reducida. Euskadi es una de las comunidades con menor temporalidad de España. En concreto se sitúa, con el 19,7%, en el tercer lugar precedida por Madrid (16,8%) y Cataluña (19,1%), según datos del cuarto cuatrimestre de 2013 de la EPA. La media española es del 24,9%. En Gipuzkoa, la temporalidad también es más reducida, según destaca Adegi, con un 21%. La temporalidad en la industria es menor -entre siete y diez puntos, según el año- que la media del conjunto de sectores. En el último año se aprecia un repunte de los contratos, que en Gipuzkoa fue del 2,3%, y también de los indefinidos (15,2%), mientras que los temporales crecieron un 2,5%. Con todo, del total de contrataciones, el 93,8% fueron temporales y solo el 4,7% indefinidas. No obstante, existe una elevada rotación entre los contratos temporales, ya que el 73% tiene una duración inferior al mes y casi un 25% entre uno y seis meses, una situación similar a la del conjunto de Euskadi.
Por tipo de jornada, la patronal guipuzcoana resalta que la completa creció el año pasado un 44,5% respecto al año anterior, mientras que la parcial disminuyó un 27,3% y la discontínua un 16,3%, según datos de la autoridad laboral.
Salario medio. Aumenta la distancia. El salario medio de la CAV se incrementó un 1,3% interanual en 2013, la mayor subida entre las cinco comunidades que mejoraron su remuneración media, situándose en 1.982 euros mensuales, mientras que la media estatal se redujo un 0,3%, para situarse en 1.634 euros, con lo que aumenta la brecha que ya existía. De hecho, esa diferencia ha pasado de 318 euros por mes (3.816 anuales) a 348 (4.176 euros por año), según Adecco. La encuesta trimestral de costes laborales correspondiente al último trimestre de 2013 que publica el INE corrobora que la diferencia salarial entre el País Vasco y el resto de España se ha acelerado con la crisis. Así, destaca que en cinco años los sueldos han crecido un 4,94% frente al 2,88% del conjunto del Estado. Dicho informe sitúa el coste salarial por trabajador el año pasado en 2.409 euros en la CAV frente a los 1.995 en España.
Adegi va más allá y analiza la capacidad adquisitiva de los salarios guipuzcoanos durante la crisis y concluye que no se ha producido una pérdida de poder de compra. Destaca que desde 2008 los salarios se han incrementado un 13%, el mismo porcentaje que el IPC. Adecco también aborda esta cuestión y señala que si al salario nonimal se le descuenta la inflación, la evolución durante la crisis ha sido positiva, ya que ha crecido un 0,9% frente a la pérdida del 3% experimentada en el conjunto del Estado.
Euskadi, con una distribución salarial de las más equitativas de Europa. La patronal guipuzcoana también destaca como dato positivo que la distribución salarial de Euskadi es de las más equitativas de Europa, solo por detrás de Suecia, mientras que España se sitúa en el penúlttimo lugar. Entre los factores que explican esa mejor situación de la CAV está el mayor nivel de ingresos que tiene la población más desfavorecida en comparación con otras regiones y países. Así, el 10% de la población más pobre acumuló un 3,8% de los ingresos totales, frente al 2,9% de la UE-15.
Mayor porcentaje de ocupados que cursan estudios. Euskadi se sitúa a la cabeza de las autonomías en lo que respecta a ocupados que cursan estudios. Aunque este colectivo ha crecido en catorce comunidades en el último año, la CAV se encuentra entre las que más ha aumentado, por lo que pasa a ocupar el primer lugar con un 13,7% tras incrementarse 0,6 puntos porcentuales, mientras que la media estatal se sitúa en el 12%, con un incremento de tres puntos porcentuales. Otro dato significativo es el aumento paulatino del teletrabajo. Las personas ocupadas que trabajan al menos parcialmente desde su hogar ya supone el 7,6% del empleo total en España; es decir, uno de cada 13 ocupados, y suman ya 1,3 millones de trabajadores. En la CAV, esta modalidad supone el 7,9% de sus ocupados, tras incrementarse en cuatro puntos porcentuales, uno más que en el conjunto del Estado |
